El Fiscal de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, anunció el pasado miércoles que todos los conductores que provoquen un accidente de tráfico con resultado de muerte o heridas graves, serán imputados inicialmente por el delito de homicidio imprudente o lesiones, siempre que hayan cometido una imprudencia grave.
Exceso de velocidad: conducir a una velocidad superior a la establecida, dependiendo el tipo de vía será castigado con la pena de prisión de tres a seis meses o con la de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
Superar las tasas de alcoholemia permitidas: conducir con una tasa de alcohol en aire espirado superior a 0,60 miligramos por litro o con una tasa de alcohol en sangre superior a 1,2 gramos por litro, hoy está castigado con la pena de prisión de tres a seis meses; igualmente, si se trata de ingesta o de drogas tóxicas, estupefacientes o cualquier sustancia psicotrópica.
No guardar la distancia de seguridad: se considera una infracción, pero se prevé que cuando ponemos en peligro la seguridad de los demás como puede puede considerarse una conducta peligrosa y delictiva.
Conducir de forma temeraria: el hecho de circular un vehículo a motor o un ciclomotor con temeridad manifiesta y poner en concreto peligro la vida o la integridad de las personas será castigado con las penas de prisión de seis meses a dos años y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años.
La coordinación entre la Fiscalía y la Policía Judicial de tráfico será pieza clave para indagar sobre las causas del accidente teniendo en cuenta el factor vía, estado del vehículo y neumáticos, control sobre los periodos de conducción y descanso en los profesionales del transporte, la falta de pericia en la conducción o las irregularidades en el reconocimiento médico de conductores. Además, se hará constar en el atestado un informe detallado y con profundización criminológica acerca de las causas precedentes que coadyuvan al desencadenamiento final del accidente.
Este proyecto de seguimiento a las imprudencias graves se pondrá en marcha el próximo mes de agosto coincidiendo con la operación salida y regreso de las vacaciones.
Exceso de velocidad: conducir a una velocidad superior a la establecida, dependiendo el tipo de vía será castigado con la pena de prisión de tres a seis meses o con la de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
Superar las tasas de alcoholemia permitidas: conducir con una tasa de alcohol en aire espirado superior a 0,60 miligramos por litro o con una tasa de alcohol en sangre superior a 1,2 gramos por litro, hoy está castigado con la pena de prisión de tres a seis meses; igualmente, si se trata de ingesta o de drogas tóxicas, estupefacientes o cualquier sustancia psicotrópica.
No guardar la distancia de seguridad: se considera una infracción, pero se prevé que cuando ponemos en peligro la seguridad de los demás como puede puede considerarse una conducta peligrosa y delictiva.
Conducir de forma temeraria: el hecho de circular un vehículo a motor o un ciclomotor con temeridad manifiesta y poner en concreto peligro la vida o la integridad de las personas será castigado con las penas de prisión de seis meses a dos años y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años.
La coordinación entre la Fiscalía y la Policía Judicial de tráfico será pieza clave para indagar sobre las causas del accidente teniendo en cuenta el factor vía, estado del vehículo y neumáticos, control sobre los periodos de conducción y descanso en los profesionales del transporte, la falta de pericia en la conducción o las irregularidades en el reconocimiento médico de conductores. Además, se hará constar en el atestado un informe detallado y con profundización criminológica acerca de las causas precedentes que coadyuvan al desencadenamiento final del accidente.
Este proyecto de seguimiento a las imprudencias graves se pondrá en marcha el próximo mes de agosto coincidiendo con la operación salida y regreso de las vacaciones.