Los nuevos radares de tramo constituyen una de las novedades de cara a 2010, que la Dirección General de Tráfico tiene previsto instalar en las carreteras para la vigilancia y control de la velocidad. Este tipo de radares permitirá medir la velocidad media de un vehículo en un determinado tramo de carretera.
El nuevo sistema que pretende poner en marcha de cara al año que viene la DGT consiste en dos cámaras, una colocada al comienzo y otra al final del tramo, que mediante una sencilla fórmula calculan la velocidad media de dicho vehículo en el tramo. Si el conductor supera la velocidad permitida, la imagen tomada por la cámara será enviada al centro de gestión de multas de la DGT.
Con dichos sistemas, que ya funcionan a modo de prueba, Tráfico busca evitar que los conductores se salten los controles habituales de velocidad, frenando justo antes del punto donde se encuentra el radar. El nuevo sistema de radares estará señalizado de la misma manera que los radares habituales y estarán situados en las primeras fases en los túneles más peligrosos.
Tráfico tiene previsto instalar cerca de 1.500 radares más en los próximos tres años, los cuales se unirían a los 535 radares fijos y los más de 280 sistemas móviles de control de velocidad. Los nuevos sistemas están homologados por el Centro Español de Meteorología.
El nuevo sistema que pretende poner en marcha de cara al año que viene la DGT consiste en dos cámaras, una colocada al comienzo y otra al final del tramo, que mediante una sencilla fórmula calculan la velocidad media de dicho vehículo en el tramo. Si el conductor supera la velocidad permitida, la imagen tomada por la cámara será enviada al centro de gestión de multas de la DGT.
Con dichos sistemas, que ya funcionan a modo de prueba, Tráfico busca evitar que los conductores se salten los controles habituales de velocidad, frenando justo antes del punto donde se encuentra el radar. El nuevo sistema de radares estará señalizado de la misma manera que los radares habituales y estarán situados en las primeras fases en los túneles más peligrosos.
Tráfico tiene previsto instalar cerca de 1.500 radares más en los próximos tres años, los cuales se unirían a los 535 radares fijos y los más de 280 sistemas móviles de control de velocidad. Los nuevos sistemas están homologados por el Centro Español de Meteorología.